De un 'Te quiero' a la pasión hay largo trecho .

A veces las cosas, simplemente no funcionan. Siempre me fue fácil decirlo. Hasta que lo viví. Cuando me toco vivir la desfunsión de una relación, quería morir. En mi cabeza no entraba la posibilidad de que la relación no funcionara. A toda costa, quería que funcionara el asunto, de la manera que sea. Al principio creí que las cosas podían volver a funcionar. Para mi punto de vista, sólo bastaba un poco de cariño, y con eso se sacaba el barco a flote. Creía que con un poco de voluntad, se iba todo a resolver. Tarde, o temprano. En su momento fue el éxtasis del temprano. Me mataba, me torturaba, me partía al medio la idea de tener que esperar. De un día para otro, yo estaba tan segura, y él tan inseguro. Me confundí, mucho. No comprendía cómo había llegado a eso, y quería volver todo atrás, pero sabía que no podía . Sólo me quedaba esperar, y estar a su merced. Estuve tan obstinada en hacer qué funcione. Pensando un millón de posibilidades. Entendí que no podemos hacer que las cosas se den, sí no que simplemente se dan, solitas. En ese momento, lo único que pude hacer era preguntarme un montón de cuestiones. Yo lo quería (y quiero) en serio. Y creía que lo único que quería la gente era un poco de cariño real, sin vueltas, sin mentiras, sin filtros. Yo se lo podía dar. Y él no lo quería. Me costaba entender qué era lo que no funcionaba.

Supuse que la solución iba a estar en olvidarme de él, pero lógicamente no podía. Siempre, siempre volvía a mi. Lo tenía que ver, vamos al mismo colegio. Quería esconderme, o no salir. Sabía que no era la solución, la verdad. Y no me quedaba otra que verlo, y me partía el corazón saber que ya no estaba conmigo. El hecho de que ya no estuviera conmigo, venía ligado de un millón de cosas. Tenía, y tengo, un cuatrillón de palabras por expresar. Pero, y salto al presente, me pregunto para qué serviría. ¿Qué ganaría? ¿En qué cambiaría?. Tengo miedo, mucho miedo. Estoy remando en Dulce de Leche, y tengo miedo de que se me hunda el barco, por una boca floja. Estamos bien y no quiero arruinarla. Pero me estoy guardando las cosas, y así no funciona. ¿Qué me dirá? . Preferible esperar, a que él se acerque y me hable a su tiempo.

Me asusta mucho pensar en las posibilidades . Siempre hay más de un camino y eso es sabido. En un tiempo, se podrá dar cuenta de que me necesita, o de que no. Y me asusta el hecho de que algún día llegue a darse cuenta de que no me necesita. Yo no pido demasiado, no pido nada. Sólo quiero una devolución. La vida se trata de dar y recibir. ¿Sí doy, por qué no recibo? Son cosas que no puedo entender aún. No podemos forzar a alguien a querernos . Y no, el cloroformo no es una opción válida. Últimamente todo marcha bien, gracias a Dios. No sé por cuánto tiempo. Desconfío en mi suerte. Y no sé cuál sería la próxima jugada que me tiene preparada la vida. No soportaría entrar en el bajón de la última vez. Y tampoco quiero.

Me sorprende lo bien que van las cosas. Y me hace bien. Me estoy yendo feliz a dormir. Hoy iba riéndome en el micro, y llegué a mi casa con una sonrisa. Supongo que eso es bueno. Espero seguir así. Y que todo retorné a la tranquilidad.

(Les juro que voy a empezar a escribir de otras cosas, que no sean de amor)

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Me interesa tu opinión.

Así que sí comentas, te lo agradecería.

Y sí no comentas, está bien también .


Cariño : To .